domingo, 28 de noviembre de 2010

LECTURAS COMPLEMENTARIAS

A los interesados en leer un texto introductorio donde se explique de forma amena, clara y sencilla los problemas de la metafísica y la ontología les recomiendo la obra Lecciones preliminares de filosofía de Manuel García Morente. Cabe destacar que en las lecciones XV a XX de este libro se presenta una exposición bastante accesible y digerible del pensamiento de Immanuel Kant. Vale mucho la pena leerla. Pueden encontrar y descargar el texto en las siguientes direcciones:

SEGUNDA EVALUACIÓN

Alumnos de los grupos 101 y 102:

La segunda evaluación constará de los siguientes elementos:
I. Un examen escrito de 10 reactivos. Cinco serán preguntas textuales tomadas de los cuestionarios de El mundo de sofía (únicamente del cuestionario nueve al catorce), las otras cinco serán ( de opción múltiple) sobre los apuntes que dí en clase.

GUÍA TEMÁTICA

- La contraposición entre empirismo y racionalismo
- La solución al problema de los universales que da el realismo extremo, el realismo moderado y el nominalismo.
- Diferencias entre el realismo metafísico y el idealismo metafísico
- Diferencias entre el realismo epistemológico y el idealismo epistemológico.
- Filosofía de René Descartes
- Filosofía de John Locke
- Filosofía de David Hume
- Filosofía de George Berkeley
- Filosofía de Emmanuel Kant
- El Romanticismo
- Filosofía de G. W. F. Hegel
- Filosofía de Karl Marx.

II. Adicionalmente, el alumno deberán leer de forma previa la unidad 4 ("Educación tradicional y educación crítica) del libro de texto porque el día del examen se organizarCursivaán equipos para exponer, analizar, discutir y proponer soluciones a la problemática de la educación en México. Esta actividad forma parte del segundo parcial y tiene un valor de 20%.
NOTA
Se les recuerda que el próximo jueves 2 de diciembre es el último día que tienen para entregarme tareas pendientes obligatorias (Cuestionarios impresos de El mundo de sofía - del uno al ocho-, el ensayo de El nombre de la rosa) y opcionales (Comentario sobre la película de la Muestra Internacional de Cine y Apuntes sobre los videos de Hegel y Marx -no más de dos cuartillas, por favor- contenidos en esta página). Se les recuerda , asimismo, que el último día para enviar por email los cuestionarios (del nueve al catorce) es el siete de diciembre del año en curso.
Para cualquier duda que tengan sobre la segunda evaluación pueden escribirme a ladignidaddelpensador@hotmail.com

lunes, 22 de noviembre de 2010

Chaplin. Tiempos Modernos


Esta película es muy valiosa porque nos ayuda a entender el concepto de ALIENACIÓN en Marx y la dura crítica que este filósofo hace a la codicia del capitalismo.

domingo, 21 de noviembre de 2010

miércoles, 17 de noviembre de 2010

EMMANUEL KANT
(Königsberg, 1724- 1804)

Preguntas que intenta resolver la obra de Kant Crítica de la razón pura:

1) ¿Cómo son posibles los juicios sintéticos a priori en la matemática (aritmética y geometría)?

2) ¿Cómo son posibles los juicios sintéticos a priori en la física?

3) ¿Son posibles los juicios sintéticos a priori en la metafísica?



JUICIOS


I. SINTÉTICOS

- Particulares
- A posteriori
- Valen sólo para el aquí y el ahora.
- Aumentan nuestro saber.
- Son contingentes

Ejemplos:
a) Todos cuerpos son pesados.
b) El calor dilata los cuerpos.
II. ANALÍTICOS

- Universales
- A priori
- Valen para todo tiempo y lugar.
- Son tautológicos
- Son necesarios


Ejemplos:
a) Todos los cuerpos son extensos.
b) El triangulo tiene tres lados.
III. SINTÉTICOS A PRIORI

- Universales
- A priori
- Valen para todo tiempo y lugar.
- Aumentan nuestro saber
- Son necesarios


Ejemplos:
a) 2 + 2 = 4
b) La línea recta es la más corta entre dos puntos.
c) En todo movimiento que se transmite de un punto a otro, la acción es igual a la reacción.
EJERCICIO
Mencione usted qué tipo de juicio es cada uno de los siguientes, ¿analítico, sintético o sintético a priori?

La nieve es blanca: __________________________
El pentágono tiene tres lados:__________________
La mesa es azul: ____________________________
Todos los cuerpos son materiales:_______________
Los animales son sensibles:____________________
Este hombre es viejo: _________________________
E= mc2:__________________________________
El pentágono tiene cinco lados:__________________
Dios es una causa incausada: ___________________

lunes, 15 de noviembre de 2010

LECTURAS COMPLEMENTARIAS

EL EMPIRISMO DE DAVID HUME
Todas las percepciones de la mente humana se reducen a dos géneros distintos que yo llamo impresiones e ideas. La diferencia entre ellos consiste en los grados de fuerza y vivacidad con que se presentan a nuestro espíritu y se abren camino en nuestro pensamiento y conciencia. A las percepciones que penetran con más fuerza y violencia llamamos impresiones, y comprendemos bajo este nombre todas nues­tras sensaciones, pasiones y emociones tal como hacen su primera aparición en el alma. Por ideas entiendo las imágenes débiles de éstas en el pensamiento y razona­miento, como, por ejemplo, lo son todas las percepciones despertadas por el presen­te discurso, exceptuando solamente las que surgen de la vista y tacto y exceptuando el placer o dolor inmediato que pueden ocasionar. Creo que no será preciso emplear muchas palabras para explicar esta distinción. Cada uno por si mismo podrá percibir fácilmente la diferencia entre sentir y pensar. Los grados comunes de éstos son fácil­mente distinguidos, aunque no es imposible en casos particulares que puedan aproxi­marse el uno al otro. Así, en el sueño, en una fiebre, la locura o en algunas emocio­nes violentas del alma nuestras ideas pueden aproximarse a nuestras impresiones del mismo modo que, por otra parte, sucede a veces que nuestras impresiones son tan débiles y tan ligeras que no podemos distinguirlas de nuestras ideas. Pero a pesar de esta próxima semejanza en pocos casos, son en general tan diferentes que nadie puede sentir escrúpulo alguno al disponerlas en dos grupos distintos y asignar a cada uno un nombre peculiar para marcar esta diferencia.

Existe otra división de nuestras percepciones que será conveniente observar y que se extiende a la vez sobre impresiones e ideas. Esta división es en simples y complejas. Percepciones o impresiones e ideas simples son las que no admiten distinción ni separación. Las complejas son lo contrario que éstas y pueden ser dividi­das en partes. Aunque un color, sabor y olor particular son cualidades unidas todas en una manzana, es fácil percibir que no son lo mismo, sino que son al menos distinguibles las unas de las otras.

Habiendo dado por estas divisiones orden y buena disposición a nuestros obje­tos, podemos aplicamos a considerar ahora con más precisión sus cualidades y rela­ciones. La primera circunstancia que atrae mi atención es la gran semejanza entre nuestras impresiones e ideas en todo otro respecto que no sea su grado de fuerza y vivacidad. Las unas parecen ser en cierto modo el reflejo de las otras, así que todas las percepciones del espíritu humano son dobles y aparecen a la vez como impresio­nes e ideas. Cuando cierro mis ojos y pienso en mi cuarto las ideas que yo formo son representaciones exactas de impresiones que yo he sentido, y no existe ninguna circunstancia en las unas que no se halle en las otras. Recorriendo mis otras percep­ciones hallo aún la misma semejanza y representación. Las ideas y las impresiones parecen siempre corresponderse las unas a las otras. Esta circunstancia me parece notable y atrae mi atención por un momento.

Después de una consideración más exacta hallo que he sido llevado demasiado lejos por la primera apariencia y que debo hacer uso de la distinción de percepciones en simples y complejas para limitar la decisión general de que todas nuestras ideas o impresiones son semejantes. Observo que muchas de nuestras ideas complejas no tienen nunca impresiones que les correspondan y que muchas de nuestras impresio­nes complejas no son exactamente copiadas por ideas. Puedo imaginarme una ciu­dad como la nueva Jerusalén, cuyo pavimento sea de oro y sus muros de rubíes, aunque jamás he visto una ciudad semejante. Yo he visto París, pero ¿afirmaré que puedo formarme una idea tal de esta ciudad que reproduzca perfectamente todas sus calles y casas en sus proporciones justas y reales?

Por consiguiente, veo que, aunque existe en general una gran semejanza entre nuestras impresiones e ideas complejas, no es universalmente cierta la regla de que son copias exactas las unas de las otras. Debemos considerar ahora qué sucede con nuestras percepciones simples. Después del examen más exacto de que soy capaz me aventuro a afirmar que la regla es válida aquí sin excepción alguna y que toda idea simple posee una impresión simple que se le asemeja, y toda impresión simple, una idea correspondiente. La idea de rojo que formamos en la obscuridad y la im­presión de éste que hiere nuestros ojos a la luz del Sol difieren tan sólo en grado, no en naturaleza. Es imposible probar por una enumeración particular que sucede lo mismo con todas nuestras impresiones simples e ideas. Cada uno puede convencer­se, con respecto a este punto, recorriendo tantas como le plazca; pero si alguno negase esta semejanza universal, no veo otro modo de convencerle más que pidién­dole que muestre una simple impresión que no tenga una idea correspondiente, o una idea simple que no tenga una impresión correspondiente. Si no respondiese a este desafío, como ciertamente no lo hará, podremos, dado su silencio y nuestra propia observación, establecer nuestra conclusión.

Así, hallamos que todas las ideas o impresiones simples se asemejan las unas a las otras, y como las complejas se forman de ellas, podemos afirmar en general que estas dos especies de percepciones son exactamente correspondientes. Habiendo descubierto esta relación, que no requiere un examen ulterior, siento curiosidad por encontrar algunas otras de sus cualidades. Consideremos qué sucede con respecto de su existencia, y con respecto a estas impresiones e ideas también cuáles de ellas son causas y cuáles efectos.
La detallada indagación de esta cuestión es el asunto del presente TRATADO, y, por consiguiente, nos contentaremos aquí con establecer la proposición general de que todas nuestras ideas simples en su primera apariencia se derivan de impresiones simples que son correspondientes a ellas y que ellas representan exactamente. Al buscar fenómenos que prueben esta proposición los hallo solamente de dos géneros, pero en cada género los fenómenos son patentes, numerosos y concluyentes. Prime­ramente me aseguro por una nueva revisión de lo que ya he afirmado, a saber: que toda impresión simple va acompañada de una idea correspondiente, y toda idea sim­ple, de una impresión correspondiente. De esta unión constante de percepciones semejantes concluyo inmediatamente que existe una gran conexión entre nuestras impresiones e ideas correspondientes y que la existencia de las unas tiene una consi­derable influencia sobre la de las otras. Una unión constante tal en un tal número infinito de casos no puede jamás surgir del azar, sino que prueba claramente la de­pendencia por parte de las impresiones de las ideas o de las ideas de las impresiones. Para que yo pueda saber de qué lado esta dependencia se halla considero el orden de la primera aparición y hallo, por la experiencia constante, que las impresiones sim­ples preceden siempre a sus ideas correspondientes y que jamás aparecen en un orden contrario. Para dar a un niño la idea de escarlata o naranja o de dulce o amar­go, presento los objetos, o, en otras palabras, le produzco estas impresiones, pero no procedo tan absurdamente que intente producir las impresiones despertando las ideas. Nuestras ideas, en su aparición, no producen sus impresiones correspondientes y no podemos percibir un color o sentir una sensación tan sólo por pensar en ella. Por otra parte, hallamos que una impresión, ya del alma, ya del cuerpo, va seguida constan­temente de una idea que se le asemeja y es solamente diferente en los grados de fuerza y vivacidad. La unión constante de nuestras percepciones semejantes es una prueba convincente de que las unas son causas de las otras, y la prioridad de las impresiones es una prueba igual de que nuestras impresiones son las causas de nues­tras ideas y no nuestras ideas de nuestras impresiones.

Para confirmar esto consideraré otro fenómeno manifiesto y convincente, que consiste en que siempre que por un accidente las facultades que producen algunas impresiones se hallan fuera de función, como cuando una persona es ciega o sorda de nacimiento, no sólo se pierden las impresiones, sino también las ideas correspon­dientes, de modo que no aparece jamás en la mente el más pequeño rastro de unas y otras. No sólo esto es cierto cuando los órganos de la sensación se hallan totalmente destruidos, sino también cuando no han sido jamás puestos en acción para producir una impresión particular. No podemos formarnos una idea precisa del sabor de un plátano sin haberlo probado realmente.

Sin embargo, existe un fenómeno contradictorio que puede probar que no es absolutamente imposible para las ideas preceder a las impresiones correspondien­tes. Creo que se concederá fácilmente que las varias ideas distintas de colores que percibimos con los ojos o de los sonidos que nos proporciona el oído son realmente diferentes las unas de las otras, aunque al mismo tiempo semejantes. Ahora bien; si esto es verdad de los diferentes colores, debe no ser menos cierto que los diferentes matices del mismo color producen cada uno una idea distinta independiente de las demás; pues si esto se niega, es posible, por la graduación continua de los matices, pasar de un color insensiblemente al que le es más remoto, y si no se concede que todos los términos medios son diferentes, no se puede, sin cometer un absurdo, negar que los extremos sean los mismos. Supongamos, por consiguiente, que una persona haya gozado de la vista durante treinta años y haya llegado a conocer los colores de todas clases, excepto un matiz de azul particular, por ejemplo, que no ha tenido la suerte de encontrar. Colóquense todos los diferentes matices de este color, excepto este único, ante él, descendiendo gradualmente del más obscuro al más claro; en este caso, es manifiesto que percibirá un hueco donde falta este matiz y se dará cuenta de que existe en este lugar una distancia mayor entre los colores conti­guos que en algún otro. Me pregunto ahora si es posible para él suplir por su propia imaginación esta falta y producir la idea de este particular matiz, aunque no le haya sido nunca proporcionada por los sentidos. Creo que pocos no serán de la opinión de que puede, y esto podrá servir como prueba de que las ideas simples no se derivan siempre de las impresiones correspondientes, aunque el caso es tan particular y sin­gular que apenas merece nuestra observación y que no merece que por él solo alte­remos nuestras máximas generales.

Aparte de esta excepción, no estará de más notar en este caso que el principio de prioridad de las impresiones con respecto a las ideas debe ser entendido con otra limitación, a saber: que, como nuestras ideas son imágenes de nuestras impresiones, podemos formar ideas secundarias que son imágenes de las primarias, como se ve por el razonamiento que hacemos acerca de ellas. Esto no es, propiamente hablando, tanto una excepción de la regla como una explicación de ella. Las ideas producen imágenes de sí mismas en nuevas ideas; pero como se supone que las primeras ideas se derivan de impresiones, sigue siendo cierto que todas nuestras ideas simples pro­ceden mediata o inmediatamente de sus impresiones correspondientes.

Este es, pues, el primer principio que establezco en la ciencia de la naturaleza humana y no debe despreciársele a causa de la simplicidad de su apariencia, pues es notable que la presente cuestión referente a la precedencia de nuestras impresiones e ideas es idéntica con la que ha hecho mucho ruido en otros términos, cuando se discutía si existían ideas innatas o si todas las ideas se derivaban de la sensación y reflexión. Podemos hacer observar que, para probar que las ideas de extensión y color no son innatas, los filósofos no hacen mas que mostrar que nos son proporcio­nadas por los sentidos. Para probar que las ideas de pasión y deseo no son innatas observan que tenemos una experiencia precedente de estas emociones en nosotros mismos. Ahora bien; si examinamos cuidadosamente estos argumentos hallaremos que no prueban más que las ideas son precedidas de otras percepciones más vivaces de las que se derivan y que representan. Espero que esta clara posición de la cuestión acabará con todas las discusiones concernientes a ellas y hará de más uso este prin­cipio en nuestros razonamientos de lo que parecía haberlo sido hasta ahora.
FUENTE: David Hume, Tratado sobre la naturaleza humana-Primera parte De las ideas: su origen, composición, conexión, abstracción, etcétera-, SECCIÓN PRIMERA Del origen de nuestras ideas, Editorial Porrúa, México, 1992, pp. 15-18.

viernes, 12 de noviembre de 2010

EL MATERIALISMO HISTÓRICO

En la producción social de su existencia, los seres humanos establecen determinadas relaciones, necesarias e independientes de su voluntad , relaciones de producción que corresponden a un determinado estadio evolutivo de sus fuerzas productivas materiales. La totalidad de de esas relaciones de producción constituye la estructura económica de la sociedad, la base sobre la cual se alza un edificio jurídico y político y a la cual corresponde determinadas formas de conciencia social. El modo de producción de la vida material determina el proceso social, político e intelectual de la vida en general. No es la conciencia de los hombres lo que determina su ser, sino, por el contrario, es su existencia social lo que determina su conciencia. En un estadio determinado de su desarrollo, las fuerzas productivas materiales de la sociedad entran en contradicción con las relaciones de producción existentes o –lo cual sólo constituye una expresión jurídica de lo mismo – con las relaciones de producción dentro de las cuales se había estado moviendo hasta ese momento. Esas relaciones se transforman de formas de desarrollo de las fuerzas productivas en ataduras de las mismas. Se inicia entonces una época de revolución social. Con la modificación del fundamento económico todo ese edificio descomunal se transforma con mayor o menor rapidez. Al considerar esta clase de trastrocamientos, siempre es menester distinguir entre el trastrocamiento material de las condiciones económicas de producción, fielmente comprobado desde el punto de vista de las ciencias naturales, y las formas jurídicas, políticas, religiosas, artísticas o filosóficas, en suma ideológicas, dentro de las cuales los hombres cobran conciencia de ese conflicto y lo dirimen. Así como no se juzga a un individuo de acuerdo con lo que este cree ser, tampoco es posible juzgar una época semejante de revolución a partir de su propia conciencia, sino que, por el contrario, se debe explicar esta conciencia a partir de las contradicciones de la vida material. a partir del conflicto existente entre fuerzas productivas y relaciones de producción. Una formación social jamás perece hasta que se hayan desarrollado todas las fuerzas productivas para las cuales resulta ampliamente suficiente, y jamás ocupan su lugar relaciones de producción nuevas y superiores antes de que las condiciones de existencia de las mismas no hayan sino incubadas en el seno de la antigua sociedad. De ahí que la humanidad se plantee problemas que puede resolver, pues considerándolo mas profundamente siempre hallaremos que la propia tarea sólo surge cuando las condiciones materiales para su resolución ya existen o, cuando menos, se hallan en proceso de devenir. A grandes rasgos puede calificarse a los modos de producción asiático, antiguo, feudal y burgués moderno de épocas progresistas de la formación económica de la sociedad. Las relaciones de producción burguesas son la ultima forma antagónica del proceso social de producción, antagónica no en el sentido de antagonismo individual, sino en el de un antagonismo que surge de las condiciones sociales de vida de los individuos, pero las fuerzas productivas que se desarrollan en el seno de la sociedad burguesa crean, al mismo tiempo, las condiciones materiales para resolver este antagonismo. Con esta formación social concluye, por consiguiente, la prehistoria de la sociedad humana. [1]


[1] Karl Marx, Prologo de Contribución a la critica de la economía política, Siglo veintiuno editores, México, primera edición en español, 2003, pp. 4-6.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

CUESTIONARIO 14 (El Mundo de Sofía)

CUESTIONARIO No. 14 de El mundo de sofía
(Marx, pp. 471-493)

1. Desde tu perspectiva, ¿qué quiso decir Marx cuando señaló que «los filósofos simplemente han interpretado el mundo de modos distintos; lo que hay que hacer ahora es cambiarlo»?
2. ¿Por qué para Marx son las condiciones materiales las que deciden cómo pensamos?
3. ¿Qué es para Marx la base y la supraestructura de la sociedad?
4. ¿Por qué se dice que Marx es un materialista dialéctico?
5. ¿Qué son las «condiciones de producción» y qué son las «fuerzas productivas» para Marx ?
6. ¿Qué son las relaciones de producción para Marx?
7. ¿Por qué para Marx la Historia es una historia de la lucha de clases?
8. ¿Qué relación hay entre la conciencia y el trabajo para Marx?
9. ¿Qué es la alienación para Marx?
10. ¿Por qué para Marx el capitalismo es autodestructivo?
11. ¿Qué es la dictadura del proletariado?
12. ¿Qué es el comunismo?
13. ¿Cuál es la trascendencia del socialismo y cuáles son sus contribuciones para la mejoría de la humanidad?
14. ¿Cuál es la diferencia entre la socialdemocracia y el leninismo?

FECHA DE ENTREGA: 2/12/10

CUESTIONARIO 13 (El Mundo de Sofía)

CUESTIONARIO No. 13 de El mundo de sofía
(Hegel; Kierkegaard, pp. 438-470)

1. ¿Por qué para Hegel la historia del pensamiento puede ser comparada con el curso de un río?
2. ¿Por qué para Hegel la razón es dinámica, histórica y «progresiva»?
3. ¿Qué es la dialéctica hegeliana? Explica el concepto con el ejemplo de los presocráticos.
4. ¿Qué significa pensar dialécticamente? Pon un ejemplo.
5. ¿Por qué para Hegel “…la Historia demostrará que mucho de lo que para nosotros son evidencias, no aguantarán el juicio de la posteridad.”?
6. Explica la distinción entre dos verdades establecida por Niels Bohr. Ejemplifica.
7. ¿Qué es la razón subjetiva para Hegel?
8. ¿Qué es la razón objetiva para Hegel?
9. ¿Qué es la razón absoluta para Hegel?
10. Explica las diferencias entre panteísmo e individualismo mediante el ejemplo de las botellas azul y roja.
11. Explica la crítica kierkigaardiana a la filosofía de Hegel.
12. ¿Por qué para Kierkegaard la verdad es «subjetiva»?
13. ¿Por qué para Kierkegaard lo que podemos saber a través de la razón es inesencial?
14. ¿Qué es la fase estética para Kierkegaard?
15. ¿Qué es la fase ética para Kierkegaard?
16. ¿Qué es la fase religiosa para Kierkegaard?

FECHA DE ENTREGA: 25/11/10

CUESTIONARIO 12 (El Mundo de Sofía)

CUESTIONARIO No. 12 de El mundo de sofía
(El Romanticismo, pp. 414 – 437)

1. ¿Qué es el Romanticismo?
2. ¿Qué fue lo que revaloró el Romanticismo?
3. ¿Por qué el Romanticismo implicó el renacimiento de la antigua conciencia cósmica?
4. ¿Cómo concibieron a la naturaleza los románticos?
5. ¿Por qué para Schelling naturaleza y conciencia humana son dos expresiones de lo mismo?
6. ¿En qué consiste la nueva visión de la historia de Herder?
7. ¿Cuáles son las diferencias entre el Romanticismo universal y el Romanticismo nacional?

FECHA DE ENTREGA: 18/11/10

lunes, 1 de noviembre de 2010

CUESTIONARIO 11 (El Mundo de Sofía)

CUESTIONARIO No. 11 de El mundo de sofía
(Kant, pp. 388-413)

1. ¿Qué es espacio y tiempo para Kant? ¿Por qué para él espacio y tiempo son dos formas de conciencia que preceden a toda experiencia?
2. ¿En qué consiste el «giro copernicano» de Kant?
3. ¿Qué defectos encuentra Kant en el racionalismo y en el empirismo?
4. ¿Cómo resolvió Kant el problema de la ley causa-efecto planteado por Hume?
5. ¿Qué opinas de la idea de Kant, según la cual, no podemos saber cómo son las «cosas en sí»? ¿Estás de acuerdo con él?
6. ¿Cuál es la diferencia entre la forma y el material del conocimiento?
7. ¿Por qué crees tu que para Kant cuando hacemos referencia a las grandes cuestiones filosóficas (inmortalidad del alma, existencia de Dios, etc.) la razón opera fuera de los límites del conocimiento humano?
8. ¿Por qué para Kant es imposible demostrar la existencia de Dios por medio de la razón?
9. ¿Qué son y cuáles son los postulados prácticos kantianos?
10. ¿Qué es para Kant la «razón práctica»?
11. ¿Por qué para Kant la ley moral es «formal»?
12. ¿Qué significa la formulación del imperativo categórico kantiano que dice: «siempre debes actuar de modo que al mismo tiempo desees que la regla según la cual actúes pueda convertirse en una ley general»?
13. ¿Qué significa la formulación del imperativo kantiano que dice: «siempre debes tratar a las personas como si fueran una finalidad en sí y no sólo un medio para otra cosa»?
14. ¿Por qué la ética de Kant es una ética de la obligación?
15. ¿Por qué la ética de Kant es una ética de la intención?
16. ¿Cuál es la diferencia en la concepción del ser humano cuando es considerado un ser que percibe y cuando es visto como un ser de la razón?
17. ¿Por qué Kant influyó en la creación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU)?

FECHA DE ENTREGA: 11/11/10